Ellos sofocan, ellos malintencionados, ellos vuelven, ellos se van, ellos tristes, ellos bailan, ellos lastiman, ellos duelen, ellos justifican, piden perdón, ellos jóvenes, ellos crueles, silencios. Ellos inviernos y veranos, ellos el hambre y el miedo. Ellos mis ojos, ellos mis lagrimas, la devoción, ellos mis diarios adolescentes, ellos la locura. Ellos anestesiados, ellos un departamento, ellos tanto tiempo, tantos libros, ellos en su mundo. Ellos dos años atrás, ellos canciones y soledad, ellos lejos, ellos talentosos, ellos límites rotos, ellos y ella muerta, ellos desconsolados…ellos unidos.
Ellos miran el cielo, ellos se fuman un porro, ellos filosofan, ellos se quieren, ellos se abren, ellos reales, ellos parten juntos al sueño. Ellos sublimes, ellos divinos, ellos oscuros, ellos compañeros. Ellos los amantes, ellos los doctores, los placebos, los calmantes, ellos los pilares, ellos la comunidad, ellos abuelos, ellos padres, amigos, hermanos. Ellos desaparecidos, ellos abandonados, ellos la herida, ellos el flagelo de ayer, ellos la negación, ellos lo impensable, ellos el adiós repentino, ellos la ansiedad, la preocupación, ellos noches de insomnio, ellos rencor, ellos congelados, ellos el pasado, ellos fantasmas, ellos acabados.