Esta capacidad de entender la soledad es una de las peores cualidades que poseo. Me arden los ojos de tanto llanto, los oídos de tanto silencio. No encuentro refugio de mis recuerdos, y la verdad, tanto dolor me esta matando. No quiero saber esto que se desde que tengo sentido común, esta condena que es no encontrarle goce a nada en esta puta vida. No poder disfrutar de un momento, no largarme a nadar por miedo a ahogarme. Me detesto, me detesto tanto, y tengo que despertarme todos los días sabiendo que soy quizás la chica de 22 años más sola y triste que jamás se vio caminar por el mundo.
Un cuerpo moribundo motivado por la arbitrariedad impuesta desde una realidad que me obliga a seguir a pesar de no sentir los pies ni las grietas que rompen las plantas de mis cimientos. Mi cabeza exploto hace rato, de mi corazón solo queda el polvo. Pero se mentir, aprendí de la mejor…
Soy una persona fría, distante, emocionalmente incapaz de demostrar cariño físico, casi que me molesta la gente extraña, porque la verdad no le veo el sentido a eso que llamamos sociabilizar. Si total, todas las minas son garcas y los flacos solo te quieren llevar a la cama. Será que conozco demasiada gente y nadie vale la pena realmente…y esos que valieron la pena en algún fugaz momento, están muertos, o bien me había equivocado al dejarlos entrar. A final de cuentas estoy sola, siempre haciendo torniquetes para contener las lágrimas, escondiendo los flagelos de la tristeza, mintiendo con la sonrisa más bella que tengo.