Sobradas razones tengo para llorarte y lastimarme. La tristeza resiste al olvido y sigo yo aca...haciendo castillos de arena en las costas del sueño, contemplando el oleaje melancólico del mar danzante, que te trae escondido en la espumosa acuosidad.
Una luna rota me contempla descorazonada, casi completamente loca. Falta mi alma, faltan mis sentidos...sin emociones que guíen mi camino, voy errando, gastando la vida, añorando lo que ya no tengo. Sin silencio, o ruido que despierten mis oídos, sin un golpe que me desgarre, o una caricia que me entibie la mirada...miro al abismo; la vasta oscuridad del letargo agónico, que se contorsiona y amolda en los rincones mas activos de mi mente, esparce un efectivo veneno cual congela la sangre de mis venas, vacía la esencia de mi ser. Al mar va a parar todo lo que soy, lo que fui, y jamás seré; Ahogándose en un sinsentido absurdo regido por una mediocridad que ni la rutina supera o aplaca, mis palabras naugrafan; Tan perdidas y agotadas se rinden, dicen basta.
Una luna rota me contempla descorazonada, casi completamente loca. Falta mi alma, faltan mis sentidos...sin emociones que guíen mi camino, voy errando, gastando la vida, añorando lo que ya no tengo. Sin silencio, o ruido que despierten mis oídos, sin un golpe que me desgarre, o una caricia que me entibie la mirada...miro al abismo; la vasta oscuridad del letargo agónico, que se contorsiona y amolda en los rincones mas activos de mi mente, esparce un efectivo veneno cual congela la sangre de mis venas, vacía la esencia de mi ser. Al mar va a parar todo lo que soy, lo que fui, y jamás seré; Ahogándose en un sinsentido absurdo regido por una mediocridad que ni la rutina supera o aplaca, mis palabras naugrafan; Tan perdidas y agotadas se rinden, dicen basta.